La unión matrimonial es un regalo sagrado de Dios, diseñado para reflejar la relación de Cristo y Su iglesia. Durante este retiro, recordaremos que el matrimonio no es solo la unión de dos personas, sino un testimonio vivo del amor de Cristo. En un mundo lleno de distracciones y desafíos, es vital regresar a la Palabra de Dios como nuestro fundamento. Que cada pareja pueda encontrar en las Escrituras la guía, el consuelo y la esperanza que necesitan para fortalecer su compromiso y glorificar a Dios en su relación. ¡Únete a nosotros para redescubrir la belleza y el propósito divino del matrimonio!
“Por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre.” (Marcos 10:9)